martes, octubre 25, 2011

CATARSIS














La catarsis perfomativa de Rosalía me recuerda a mi AUTOBIOGRAFIA:

Mi hermana con quien mantenía una relación perfecta, se había muerto de repente a causa del puto tabaco.
Cuando me enteré, me caí por unas escaleras de mármol y me rompí el hombro y el pie.
Lloraba tanto que mi madre me preguntó: ¿Cuando vas a dejar de llorar? No podía parar, lo intentaba pero no lo conseguía, de día y de noche.
Cuando hice la performance me quedé tranquila.

Rosalía es una actriz dramática extraordinaria.
Yo le he visto en escena en varias ocasiones y me producía un efecto que nunca con nadie lo he vuelto a sentir.
Cuando al principio de la catarsis ella dice que hace lo que le sale del corazón, es en donde está la clave de su asombroso poder de seducción.
Los estudios le habrán servido para aprender la técnica, pero el talento lo tiene desde que nació.

Esta catarsis le vino muy bien, ya que había tenido un día difícil y nada como sacar los nervios de la manera mas rápida y eficaz: la danza y la palabra.

Mi hijo el pequeño, cuyo nombre tengo prohibido mencionar en Internet, es muy controlado, muy civilizado, jamás levanta la voz ni se enfada ni da una mala contestación, lo cual supongo que le costará un esfuerzo constante. Yo lo noté cuando un día en una cala solitaria en Mallorca, empezó a gritar mientras se bañaba en ese tranquilo y cálido Mediterráneo y creo que allí sacó todos los demonios acumulados durante años.



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